¿QUÉ ES?
Es una parafunción mandibular en la que se aprietan los dientes superiores contra los inferiores y los mueven de delante a atrás y viceversa, provocando el desgaste de las piezas. Se realiza de forma inconsciente, sobre todo por la noche, en la fase REM del sueño, al no darse cuenta de que está apretando, es más difícil de controlar.
¿QUÉ LO CAUSA?
Los factores que pueden hacer aparecer el bruxismo, cause o no dolor, varían de una persona a otra:
1. Estrés, es el factor principal.
2. Ansiedad
3. Alineación de los dientes, sobre todo si no es la correcta
4. Postura durante el sueño
5. Hábitos de dormir
6. La capacidad de relajarse
¿QUÉ SÍNTOMAS PODEMOS NOTAR?
Al apretar los dientes, a parte del desgaste que se produce, se ejerce presión sobre músculos, tejidos y estructuras alrededor de la mandíbula, así que podemos notar:
1. Dolor de cabeza
2. Sensibilidad muscular
3. Sensibilidad a las cosas frías, calientes o dulces
4. Trastornos alimentarios
5. Dolor o inflamación mandibular
6. Trastornos del sueño
7. Dolor de oído
¿CÓMO SE TRATA?
Los objetivos del tratamiento del bruxismo van orientados a:
1. Reducir el dolor
2. Prevenir el daño dental por el desgaste
3. Disminuir el rechinamiento de los dientes
4. Relajar la musculatura
5. Evitar daños permanentes en la articulación temporomandibular (ATM)
Para ello, se recomienda el uso de férulas de relajación, de uso nocturno principalmente. Estos aparatos, bien ajustados, ayudan a reducir el apretamiento de los dientes y a relajar la musculatura.
Si existe dolor, estas recomendaciones pueden ayudar a aliviarlo:
1. Aplicar hielo o calor húmedo en la zona inflamada
2. Evitar alimentos duros
3. Hacer ejercicios de fisioterapia para recuperar la acción de los músculos y la ariculación.
4. Hacer ejercicios de relajación de los músculos faciales y mandibulares de forma habitual
5. Evitar aperturas extremas de la boca.
6. Reducir el estrés diario.
7. Si es necesario, se pueden tomar analgésicos o relajantes musculares.
Comentarios